Tras haber dado positivo en un test de estos de farmacia en casa y ver que tenía un pequeño catarro... decidí advertir a mis compañeros de la oficina que tenía el virus. Ya no fui a trabajar al día siguiente. Estaba bastante bien pero con la impresión perdí motivación y me entró la ansiedad. No puedo estar cerca de mi familia, de mis hijos, de mi mujer. Tengo que estar con mascarilla y la vida cambió. Todo por alguna imprudencia que no logro entender en qué momento la puedo encajar. En fin, el primer día después del primer test fue una cosa que me vino bien. Tenía ganas de vacaciones. Mente y cuerpo descansaron, desconectaron de la vida. Un gran punto de inflexión. Llamé al médico para hablarle de caso y ella me aconsejó que hiciera el test para tener un resultado oficial. Me explicó las pautas que tenía que tener en cuenta y además me dijo que aplicara el sentido común... para mí eso es complicado y nunca me pareció que yo tuviera mucho de eso. El problema vino cuando mis hi
Mil cosas escritas sin pensar: pensamiento, sicología, evolución personal...