Realmente, acabamos pensando como todos los demás. Nos hacen ser sociales y al final nos covertimos en personas que realizan cosas similares y estadísticamente iguales. Al final, las muertes y los nacimientos son el cambio: surgen diferentes, y no siempre nuevas, ideas de niños y jóvenes. No tienen experiencia pero tienen una creatividad que marcan la diferencia. Todos pensamos en la misma cosa y olvidamos lo más importante. Estamos preocupados por lo que nos deparará y por lo que hicimos y nos olvidamos de vivir el presente. No quiero decir que olvidemos las cosas pequeñas sino que olvidamos esos pequeños actos que hacen que cambie el mundo. Finalmente, ¿qué pasa? nos cansamos y dejamos de luchar. No nos complacemos con nada que no apruebe nuestro entorno. Tenemos otros problemas: no se hace lo necesario sino lo productivo. Pensamos en la producción y en el rendimiento: olvidándonos del ingenio. Destruyendo todas las cosas que son necesarias pero que "no son rentables"
Mil cosas escritas sin pensar: pensamiento, sicología, evolución personal...