Decimos que tenemos mucho vicio, decimos que somos unos frikis. Piensan que somos unos sociopatas sentados en sus sillones jugando por pura adicción. Parcialmente tienen razón. Pero hay mucho más. A partir de aquí. Narro en primera persona. He vivido miles de vidas virtuales, e viajado un montón de lugares legendarios: Ventormenta, Los Paramos; San Andrés,... Viví entre portales y dragones, entre blasters y sables de luz. He sido un criminal, un mafioso; un druida, un vampiro, un hombre lobo; mago, guerrero; elfo, enano. He viajado y pilotado naves espaciales; tanques, helicopteros. Me han matado de millones de formas diferentes, tiros en la cabeza; por espadas, bastones, mazas, sables o hachas; he muerto por fuego, rayos, hielo, escarcha, agua. He sufrido infinidad de sustos mortales en escenarios escalofriantes, oscuros y terribles, con olores indescritibles que solo indicaban una cosa, muerte. Pero al final, siempre se alcanzaba el objetivo, diversión, emoción conocimiento y vive
Mil cosas escritas sin pensar: pensamiento, sicología, evolución personal...