Un borrador que no sirve para nada. Se llena de palabras y sigue vacío. Un borrador eterno, aunque tenga sentido, se pierde si no hay lector que lo quiera.
Un borrador que es vacío y sigue vacío aun teniendo mucho que decir. Un borrador que no se ve, puede contener muchas verdades, pero se quedará en silencio sino tiene recorrido. Se mantendrá en algún lugar, pero, sin la lectura, será nada...
Esta introducción poco válida sirve para entonarme a la hora de decir algo. -No me doy entonado porque estoy en un día crítico de mi existencia.
¡Ahora o nunca! ¡Ahora o nunca! palabras que me resuenan en la cabeza constantemente y se quedan permanente. Perdiendo volumen, perdiendo fuerza en mi interior hasta que me olvido de ellas.
Estoy para verme morir porque ya he vivido y solo sé contar el pasado. Un pasado, sin alma, sin rollito, sin pizca de gracia porque es un pasado ya narrado. El presente, no es interesante porque hace tiempo que me parece más interesante lo vivido. Hoy la lluvia es lluvia y mañana ya sé que puede ser mar o lágrimas. Es un ciclo que se repite, un ciclo perpetuo en el que yo, como entidad, por muy grande y fuerte que sea o inteligente, no seré capaz de detener, modificar. No soy transcendente, ni sé cómo serlo. Me siento pequeño, nimio. Alguna vez fui arrogante, no porque lo creyese de verdad; fue por miedo a la inmensidad que me rodea.
Soy un punto en un plano, en un cubo, en todas las dimensiones en las que pueda vivir. Sigo siendo un puntico que nadie hará caso por mucho que me ponga a rebotar o a escribir cosas o a fabricar objetos. Mis ideas son finitas, soy un finito que se puede estirar, pero soy nada ante la realidad que crece constantemente. Hay hombres inmensos, que son poco más que cualquier, y sin embargo pueden decir algo más porque se esforzaron por tener más recorrido.
No tengo recorrido, no soy nada especial, no tengo cualidades que me distingan de todos los demás y sin embargo soy irrepetible. Tengo un montón de mierda en mi cabeza... igual que la infinidad de las personas de esta persona y aun así creo que lo único quiero sentirme es mierda... soy mierda ante el mundo y me gusta serlo. Deseo salir de mi forma y convertirme en otra cosa y, sin embargo, pasa el tiempo y sigo siendo la mierda más mierda del universo.
Soy egoísta. No sé decir más que pensamientos que giran alrededor mía.
Ahora, por ejemplo, oigo como el agua cae, alrededor mía sin parar, cada vez más y más junta cae haciendo vibrar la chapa del tejado de la nave en la que trabajo. No escucho mis pensamientos. No me acuerdo del mundo que me rodea. Solo me acuerdo cuando algún tipo de disrupción me afecta, en ese momento, siento que no estoy solo, puede que hasta sienta un miedo bajo a todo lo que tengo alrededor, pero lo más grave es que no me acuerdo de los demás. Solo me acuerdo de ellos cuando sus sentimientos me afectan a mi cordura. Soy el egoísta que siente e imita los sentimientos del mundo que le rodea, pero que en realidad no me importa nada lo de los demás. Más egoísmo, más egoísmo.
Más egoísmo. Más egoísmo.
Después están las muertes, después está el pasado que solo queda en mi recuerdo frente a lo que nace y el presente lo convierte en su pasado reciente y pasará a ser historia.
Terrible este mundo, no puedo hablar con nadie porque nadie parece entenderme y me vuelvo loco porque hablo conmigo mismo. Con las pantallas, con los artilugios eléctricos y mi cerebro parece una bolsa de desechos que no tiene facilidad para transmitir sus cosas porque lo que hay fuera no es ni parecido a mi pensamiento... mi pensamiento es el intercambio de palabras entre mi lado derecho y el otro lado. Entre mis manos y mi cerebro. Entre el estómago y las tripas y la espalda... la piel también está en la ecuación.
Separo todo en trozos pequeños y solo encuentro defectos en la desestructuración del mundo, dándome cuenta de que yo soy un defecto, un error sin remedio. Soy una persona que perjudico a otras muchas sin que las otras muchas se den cuenta.
Porquería de sensación la que tengo en mi organismo de no valer para nada. Soy mierda concentrada, soy desorientación... ¿qué puedo hacer? ¿hacia dónde puedo navegar? ¿qué tengo que hacer para cambiar mi mundo? ¿cómo hago para sentirme mejor?
Hace unos meses estaba enamorado de muchas personas. Ahora, me importa una mierda el amor porque estoy triste. Porque no encuentro el camino. Veo a mis cercanos, también tristes. Los quiero y sin embargo mi dolor los hace miserables. Soy todo dolor, y atraigo los males del mundo. Estoy cabreado y seguiré estándolo, quizás porque tengo más ganas de llorar y de meterme en cama que arreglar lo que tengo dentro. Quiero tirar toda esta mierda y dejarla alejada de mi para conocer otros mundos.
Y sigo, y sigo, y sigo, en silencio escuchando la lluvia caer. Viendo cómo me hago viejo, viendo cómo se me inundan las ideas de agua salada como si con el tiempo lo único en lo que me convierto es en mar. Mar eterno y sabio pero muerto. Mar con millones de ideas buenas perdidas y que en su inmensidad nunca más se encontrarán. Soy el más sabio y el más callado... esa sabiduría desaparecerá en silencio y se perderá...
Me siento horrible por todo esto y mañana me despertaré y volveré a intentarlo. No tengo nada claro lo que voy a intentar, ni a donde voy a ir, pero seguiré intentándolo. No estoy cuerdo, no estoy del todo bien y sigo queriendo vivir. Mi vivencia es y será llana. Seré un vividor aburrido, sin pretensiones. Seré otro egoísta más que no tiene memoria para los otros ni para sí mismo.
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